GROOVY es una American Pale Ale que no pide permiso. Con su 5,5% de alcohol, su color ámbar y su marcado aroma a lúpulo fresco fue pensada para tomarse en presencia de guitarras distorsionadas, baterías fuertes y bajos –por supuesto- con mucho groove.
La fiesta para celebrar este lanzamiento inició con el show de Callate Mark cuyo cierre contó con la participación estelar de Wallas, estandarte del rock. Luego de las emotivas y elocuentes palabras de los dueños de ANTARES, Fer Ruíz Díaz sorprendió a todos con un improvisado repertorio de temas rockeros reversionados en guitarra acústica.
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